Me gusta

EL LEGADO FALLIDO DE SALAZAR


 por RICARDO CORTEZ



El futuro de Jerez depende en gran medida del diagnóstico que el próximo alcalde, Rodrigo Ureño, realice al inicio de su mandato. Si se parte de lo presentado en el tercer informe de gobierno de Humberto Salazar, el panorama es alarmante y está lleno de circunstancias riesgosas que amenazan con explotar a lo largo del próximo período.

La herencia de problemas no resueltos, mal diagnosticados o simplemente ignorados será el principal obstáculo que enfrentará la nueva administración.

Rodrigo Ureño no puede permitirse el lujo de confiar ciegamente en los supuestos y diagnósticos presentados por su predecesor. Humberto Salazar ha gobernado desde una burbuja, un espacio donde la autocrítica ha sido inexistente y donde la realidad del municipio se ha distorsionado según sus propios intereses y percepciones.

El gobierno saliente ha pintado una imagen que no corresponde con la realidad vivida por muchos ciudadanos. No es cierto que Salazar haya gobernado para todos. Las políticas implementadas durante su mandato no han tenido un impacto positivo en la mayoría de la población, y mucho menos en aquellos sectores clave para el desarrollo económico del municipio.

El crecimiento económico ha sido prácticamente nulo, y no se ha implementado alguna acción efectiva que favorezca a quienes son la columna vertebral del desarrollo local.

El diagnóstico que Salazar ha presentado a lo largo de su mandato es parcial y sesgado, lo que podría convertir problemas actuales en crisis a corto y mediano plazo. La visión limitada del gobierno actual no ha permitido ver los problemas en su totalidad, y esto puede tener consecuencias desastrosas para el municipio.

Áreas clave de la administración municipal han estado ausentes o, peor aún, han actuado de manera incongruente, causando estragos severos en el desarrollo de Jerez.

La falta de capacidad de respuesta del gobierno saliente es evidente, y no se puede seguir utilizando la excusa del pasado como justificación para los problemas actuales. La administración de Salazar ha fallado en su proyecto de gobierno, y el nuevo alcalde deberá ajustar muchos de estos asuntos si quiere evitar que Jerez se hunda aún más en la crisis.

El fracaso del gobierno salarzista ha colocado a Jerez en una situación delicada, tanto en lo económico como en lo político. Si el nuevo alcalde no actúa con rapidez y firmeza, el municipio corre el riesgo de regresar a un pasado oscuro, lleno de problemas que se han intentado superar durante años.

Es por ello que Rodrigo Ureño no puede permitirse continuar con la narrativa de que Jerez es un municipio "sanado" de cualquier problema, porque esta visión esconde una crisis profunda que amenaza con explotar en cualquier momento.

Deberá abordar los problemas de manera directa, sin recurrir a excusas ni a discursos vacíos. El tiempo de las excusas ha terminado; es hora de enfrentar la realidad y trabajar para un futuro mejor para todos los jerezanos. ¿Usted qué opina?

dsd_elportaljerez@gmail.com
twitter: @Rich_Cortez86

Comentarios

Entradas populares