125 DÍAS...

por RICARDO CORTEZ

Este domingo se cumplen 125 días desde que Rodrigo Ureño asumió la alcaldía de Jerez. ¿Qué ha ocurrido en este periodo? La respuesta varía según a quién se le pregunte. Mientras algunos ven estabilidad y bases para el cambio, otros siguen esperando resultados concretos.

Los primeros 100 días suelen ser un termómetro para medir el rumbo de un gobierno. Es un periodo donde la ciudadanía muestra paciencia y el "bono democrático" aún protege a la administración. Sin embargo, en Jerez, la sensación es de incertidumbre y dudas sobre la dirección del gobierno.

Desde el inicio, Ureño ha enfrentado problemas graves en seguridad, turismo, obra pública y desarrollo económico. Las promesas de cambio aún no se traducen en avances significativos. La pregunta que muchos se hacen es: ¿realmente hay un plan sólido detrás de este gobierno?

En turismo, Jerez sigue dependiendo de eventos esporádicos sin una estrategia sostenida. Sin una visión a largo plazo, el potencial turístico del municipio sigue desaprovechado. La falta de promoción y una oferta atractiva impiden que el turismo sea un motor real de desarrollo.

En infraestructura, la obra pública parece estancada. No hay proyectos emblemáticos ni mejoras visibles que marquen un cambio en la calidad de vida de los ciudadanos. Se sigue trabajando con parches y medidas inmediatas, pero sin un plan de desarrollo claro.

El desarrollo económico también presenta desafíos graves. La falta de inversión, empleo y estrategias de fortalecimiento comercial son evidentes. Un municipio sin dinamismo económico difícilmente puede aspirar a mejorar la calidad de vida de su gente.

A esto se suma la falta de claridad en la política interna. Aunque ganó con amplio respaldo, la administración de Ureño sigue sin definir una identidad clara de gobierno. La sensación de improvisación es preocupante y genera incertidumbre sobre el futuro del municipio.

La comunicación con la ciudadanía es otro punto débil. La falta de información transparente sobre avances y decisiones genera desconfianza. No basta con ruedas de prensa esporádicas; la gente necesita hechos y resultados concretos que respalden el discurso oficial.

Si bien 125 días no son suficientes para transformar un municipio, sí lo son para marcar una ruta clara. Lo que se exige no es magia, sino visión, liderazgo y estrategias bien definidas. La administración debe demostrar que tiene capacidad de enfrentar los retos con acciones firmes¿Usted qué opina?

PUNTO Y APARTE: Preocupa que el alcalde desconozca el Plan de Desarrollo Municipal. Sin un rumbo bien definido, es difícil que haya avances reales. El tiempo de las excusas se agota y la confianza de la ciudadanía no es eterna. ¿Jerez está viendo el inicio de un cambio o solo más de lo mismo?

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