EL DESAFÍO DE UREÑO

por RICARDO CORTEZ

El futuro alcalde se encuentra en una etapa crucial, analizando cuáles serán sus primeros movimientos, los cuales darán una idea clara de lo que puede ser el perfil de su gobierno.

Los indicios están en el aire, ya que cualquier nombramiento, en un buen número de casos, termina por ser controvertido. Todo indicaría que los integrantes de su equipo deberán cumplir con los requisitos necesarios para afrontar los retos y problemas que hoy enfrenta el municipio.

Por más poder que pueda tener y alcanzar, Rodrigo Ureño inevitablemente tendrá que enfrentar presiones y “favores” de toda índole, ante lo que presumimos no le quedará de otra que negociar y conceder, elementos que, como se sabe, no forman parte de la dinámica actual.

Uno de los grandes problemas que ha enfrentado Humberto Salazar y su Gobierno es que la autocrítica y la respuesta del “No tengo el dato” se fue colocando como un mecanismo que desacredito su investidura y, sobre todo, dejaba ver lo mal informado que estaba de las cosas.

Quizá mucho de esto se debió a que el entorno del alcalde se fue convirtiendo en un elemento acrítico que sistemáticamente aceptaba y avalaba todo lo que la Divina Trinidad (grupo de funcionarios que manipulan al alcalde) hiciera sin poner de por medio la crítica, la alternativa y la posibilidad de que el “doctor” se fortaleciera con miradas y perspectivas diferentes de las cosas.

Reza el dicho que los hombres y mujeres inteligentes se rodean de hombres y mujeres inteligentes. Dicho de otra manera, la gobernabilidad requiere de entornos que sean críticos, por más que muchas veces esta actitud acabe por molestar a quienes gobiernan.

Rodrigo Ureño seguramente ya tiene la lista de aquellas personas que conformarán su gabinete. Habrá que ver si esa lista es un pago de presiones y favores o si realmente existe una convicción por parte del futuro alcalde de que son personas que pueden cumplir de manera importante las funciones que se les van a asignar.

Pues quienes conformen el círculo más cercano del alcalde electo deberán mostrar sus capacidades y experiencia en sus áreas, además de ser un bastión para no permitir que el futuro alcalde entre en el centralismo o en los terrenos del “ni los veo ni los oigo” porque resulta que eventualmente la crítica le puede ser adversa.

Dependerá todo esto más de los personajes que del futuro alcalde. Todos y todas insisten en la responsabilidad del voto masivo del 2 de junio. Ahora la pelota está en su cancha y no se vale ver el partido desde la tribuna.

Es crucial que el nuevo gobierno no repita los errores del pasado y que se rodee de personas capaces y comprometidas. Solo así se podrá avanzar hacia un futuro más prometedor para Jerez, uno donde las promesas de campaña se traduzcan en realidades palpables para todos sus habitantes. ¿Usted qué opina?

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