LO IMPORTANTE ES GANAR

No porque algunos políticos están cambiando de partido significa que se esté renovando la clase política en nuestro municipio.

Esto se debe a que muchos que se sienten “políticos” están buscando cómo colarse en la próxima contienda electoral, esto debido a que las organizaciones en las cuales originalmente militaban les han cortado las ilusiones por contender en este proceso electoral.

Este hecho pone en evidencia la escasa diferencia que hay entre los postulados de los partidos políticos. Comprendiendo que las tendencias políticas hoy en día se van pareciendo cada vez más, los conceptos de izquierda, centro y derecha, a veces acaban juntándose.

Otro de los problemas que se enfrentan es que quienes quieren acceder y participar de la actividad política deben pasar por los grupos y tribus. Si de casualidad logran entrar en la mayoría de los casos no les queda de otra que aceptar el juego de “apechugar”.

En general, los partidos en cada elección se juegan su rostro con tal de ganar o al menos tener una presencia significativa, por el pánico del registro y el dinero. Para ello, no les importa quiénes son sus candidatos ni de dónde vienen, lo que los mueve es ganar a como dé lugar.

Por lo que algunos partidos se han convertido en franquicias, negocios familiares y en otros casos, se acomodan en función de sus intereses que los lleva a singulares alianzas, “según el sapo la pedrada”.

La vendimia de personas de estos días muestra una de las caras más acabadas del desarrollo de la política. Quienes despotrican de algunos partidos hoy sin el más mínimo recato se convierten en candidatos de estas alianzas y coaliciones.

Por supuesto que estas contradicciones confunden a los ciudadanos. No hay manera de entender cómo alguien puede hoy ser candidato a una alianza o coalición contra la cual durante meses y años arremetió una y otra vez.

La política se concentra en los mismos de siempre, mientras que las posibilidades de que los jóvenes puedan irrumpir sigue siendo limitada. En caso de hacerlo la vieja guardia los somete o se las pasa cobrando favores tirando línea sin ton sin son. A muchos políticos jóvenes no les queda de otra que cuadrarse a reglas como una forma de sobrevivencia y de lo que algunos llaman “crecimiento político”.

No se usted querido lector, pero en un buen número de casos la selección de candidatos está en línea directa con el pago de cuotas. Los “políticos” saben que hay que picar piedra, pero también saben que deben “apechugar” y “tragar sapos”.

Vienen batallas encarnizadas. No importa cómo, lo importante es ganar. ¿Usted qué opina?

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