El INCIERTO FUTURO

 

por RICARDO CORTEZ

A menos de un año de concluir su mandato como Presidente Municipal, Humberto Salazar parece estar convencido - al menos en su cabeza- de que está sentando las bases de un proyecto "transformador" y "sanador" para nuestro municipio.

Sin embargo, inesperadas decisiones, como la designación de Alonso Sánchez Bonilla como presidente del Comité encargado de la máxima fiesta de los jerezanos en su edición 2024, ha comenzado a generar opiniones encontradas y cierta controversia entre los sectores de la población.

El nombramiento de Sánchez Bonilla, hasta hace poco "asesor" del alcalde, como responsable de organizar la máxima fiesta de los jerezanos, ha levantado cejas y alimentado especulaciones en los círculos políticos locales.

Pues este movimiento, comienza a ser interpretado como el primer paso de un plan diseñado con miras al 2024, plantea preguntas sobre la verdadera naturaleza de la "transformación" que Salazar asegura estar implementando.

En un momento en el que la administración morenista navega por aguas turbulentas, Salazar cree que Alonso Sanchez Bonilla, es la persona que necesita para conducir la feria a buen puerto. Esta decisión se presenta como crucial no solo para el presente, sino también para las elecciones del próximo año.

Sin embargo, la tarea es monumental. La maldición de la feria, junto con los errores y la falta de resultados del gobierno salazarista, plantea interrogantes sobre la capacidad de Bonilla y su equipo para devolverle la calidad a la feria.

La incertidumbre es palpable. ¿Podrá responder a la confianza del alcalde y a las expectativas de los jerezanos? ¿Estará a la altura de los estándares de calidad actuales? ¿Será capaz de demostrar un desempeño superior al que ha mostrado como asesor? ¿El comité organizador podrá lidiar con el desafío y darle un giro positivo a la feria?

En medio de todas estas preguntas, una cosa es clara: Alonso Sánchez Bonilla y su equipo organizador no pueden permitirse improvisar. Se necesita una planificación detallada con mecanismos sólidos para asegurar el éxito de la feria. La responsabilidad de devolverle la confianza a la población recae en hombros de quien “asesoraba” al alcalde.

La Feria de Primavera Jerez 2024 se presenta como un reto crucial para la administración municipal. ¿Será el catalizador del cambio y la renovación que tanto se necesita, o simplemente otro capítulo en la historia de incertidumbre que rodea a esta festividad emblemática?

La última palabra, como siempre, la tendrá el tiempo y la evaluación de resultados. ¿Usted qué opina?

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